En cierto momento está moneda se perdió, los 80 comenzaron a difuminarse y Spielberg se convirtió en un ser superior que empezaba a hacer productos más serios. Pronto dejaron de sobrar esas 25 pts . Por supuesto la edad también influyó, la adolescencia y madurez hacía de las suyas y entre las primeras duras decisiones que se tomaban por la época, se encontraba la de si ir al cine o mejor explorar otros lugares no tan oscuros, pero mucho menos luminosos. Nunca pude llegar a tomar la definitiva decisión me empujara a dejar de mirar la partida sobre el hombro de un amigo en la sala de recreativos, y darle uso a ese dinero pasando a modo jugador, nunca supe si estaba listo, aunque creo que realmente lo que no supe lo que estaba viviendo hasta que ha llegado este momento.
Ayer, 08 de abril quedamos Miguel Dávila, Alfonso Ramírez y un servidor, para ver Ready Player One, unas cuantas horas previas a la grabación de este programa desde “La Marimorena”, al que posteriormente se unió Rafael Teruel y Javi García. Todo listo, micrófonos conectados a mesa de mezclas, ordenador y grabador enchufado, la banda sonora de la película ya estaba cargada en el listado de reproducción automático. Nuestro amigo Nono, camarero de La Marimorena, completaba el servicio y rellenaba bebidas después de una ronda previa para que no faltara nada. La grabación del podcast de Ready Player One, estaba a punto de comenzar y fue justo en ese preciso momento cuando recordé que esa moneda de 25 pts seguía estando ahí, en mi pantalón, donde la había guardado y que nunca llegué a gastarla. Quemaba en el bolsillo, se incendió y molestaba. Una cosa dejaba bien clara esta gustosa incomodidad , esta vez no me iba a quedar mirando como otros jugaban, esa moneda se iba a gastar, había encontrado su ranura, estaba gastada y su destino era este podcast. ¿Y por qué? ¿Por qué en este justo y preciso momento? Levanté la mirada y me vi allí junto a todos los demás, sentados en pandilla, hijos cada uno de nuestro padre y nuestra madre, riendo, con ganas de jugar, de hablar, dedicando nuestro tiempo a un podcast, y con muchas ganas de compartir, no había historia propia, pasado o futuro que se permitiera perturbar. Aquel sitió retrocedió en ese momento hasta los 80, estábamos todos listos, estábamos todos realmente READY.Mi moneda encontró su partida perfecta, pudo consumar el destino para el que estaba creada, no me importa perderla, porque nunca 25 pts. han podido dar para tantas vidas a lo largo de los años, y el resultado fue este programa especial que espero que todo el oyente pueda disfrutar tanto como nosotros lo disfrutamos ayer. Por cierto, aunque la gastara, esto no supone el final, después de la gran partida que echamos, me concedieron una vida extra.
by: Juan Pablo Videoclubsero